Mi camino hacia una vida más consciente comenzó en el 2015, después de convertirme en mamá.
Tras meses de agotamiento, ansiedad y malestar físico, fui diagnosticada con Tiroiditis de Hashimoto, una condición autoinmune que afectaba mi energía y bienestar.
Probé tratamientos, ajustes en mi estilo de vida, pero algo seguía faltando.
Fue entonces cuando me di cuenta de que sanar no era solo una cuestión física…
Era también un proceso emocional y espiritual.
Ese fue mi punto de quiebre,
Y también el inicio de un profundo despertar.
Aprendí a escuchar mi cuerpo, a reconectar con mi interior y a darme el permiso de cuidarme con amor.
Desde ahí, nació mi propósito:
acompañar a otras mujeres a reencontrarse con su bienestar, su energía y su verdad.
Hoy, miro atrás con gratitud.
Porque lo que parecía un obstáculo, se convirtió en el inicio de una nueva vida.
Y si estás aquí, quiero que sepas que dentro de ti también está esa posibilidad de transformación.